Catequesis de Confirmación
La catequesis de confirmación dura dos cursos. Se inicia con 14 años, al comenzar tercero de ESO. Los grupos se reúnen los viernes de 21 a 22, en los Locales Parroquiales.
El itinerario de iniciación cristiana es progresivo, y consiste en que el catecúmeno reciba los tres sacramentos de iniciación: bautismo, eucaristía y confirmación. Sería, por tanto, una deformación de ese proceso darlo por concluido cuando el candidato aún no ha alcanzado la plena iniciación en la vida de Dios que ofrece la Iglesia. No basta haber recibido la Primera Comunión para ser cristiano pleno.
Esta plenitud sólo se alcanza con la recepción del don del Espíritu Santo, el mismo Espíritu que recibieron los apóstoles el día de Pentecostés. De modo, que sin este sacramento, el cristiano se queda como incompleto e incapaz de vivir de una forma madura la fe que ha recibido, porque le falta la gracia del Espíritu Santo que le configura con "Jesús de Nazaret, ungido por Dios con la fuerza del Espíritu Santo, que pasó haciendo el bien" (Hch 10,38).
La parroquia consciente de la importancia de la recepción de este sacramento para culminar la iniciación cristiana, oferta a los jóvenes, la posibilidad de prepararse para la recepción de la confirmación en grupos catequéticos.
La catequesis de confirmación se desarrolla en dos cursos, donde los chicos profundizan en la primera síntesis cristiana recibida durante el período de preparación para la Primera Comunión.
Las reuniones son semanales, los viernes de 21 h. a 22 h. de la tarde, en los Locales Parroquiales.
Esta catequesis está destinada a los jóvenes que tienen 14, 15 y 16 años, y que están en la última etapa de la Educación Secundaria.
Los padres pueden ayudar enormemente a mantener los requisitos de puntualidad y asistencia de sus hijos, que siguen siendo exigibles y necesarios para dar seriedad a la formación de los chicos.
Así mismo, la asistencia habitual de la eucaristía, la confesión y la comunión frecuentes son elementos esenciales para que vayan orientándose a la recepción del Espíritu Santo. Por ello, la participación en la misa, ahora con nuevas responsabilidades, que pueden asumir si lo desean (coro, monaguillos,...), es esencial para ellos. Por ello, es preciso recordar que ningún chico que no participe habitualmente de la misa dominical puede recibir la confirmación.
En esta fase de su formación y en la de posconfirmación son una ayuda muy eficaz las convivencias. Éstas son encuentros de uno o mas días en los que hay oración, juegos, reunión por grupos, deportes... Suelen girar cada una de estas convivencias en torno a un tema.
Para los chicos que, por cualquier motivo, inicien su preparación para la confirmación con una edad más avanzada, se articulará, en la medida de lo posible, un plan formativo adecuado a su situación. En el caso de los adultos, véase lo dicho en "Iniciación cristiana de adultos".
Descárgate aquí la Inscripción y tráela a la Parroquia: