Hermanas de la Caridad de Santa Ana
Las Hermanas de la Caridad de Santa Ana fueron fundadas por el Padre Juan Bonal y la Beata Mª Rafols Bruna en el año 1.804 en el hospital Real y General de Nuestra Señora de Gracia de Zaragoza.
Aunque el primer motivo de la Fundación fue la atención a los enfermos de dicho hospital pronto apareció la idea y necesidad de encargarse de la educación y formación de los hijos de las madres solteras que trabajaban en el mismo hospital recogiendo también a "niños de la calle".
El 4 de mayo de 1.894, llegaron a Llíria (Valencia) un pequeño grupo de Hnas. a petición de gente de la localidad que tenían gran interés en que los niños y niñas del pueblo recibieran una formación integral, tanto cultural como cristiana.
Se instalaron en un piso que muy pronto tuvieron que abandonar por falta de espacio, debido a la gran afluencia de alumnos. Algo más tarde se establecieron en una casa de la Plaza "Partidors" donde permanecieron hasta el año 1970, pues a causa de las normativas del Ministerio de Educación, el Centro necesitaba una auténtica reforma y los Superiores optaron por construir un nuevo Colegio que cumpliera con las exigencias que en aquel momento se exigían.
Empezaron las obras en las afueras de la Ciudad aprovechando que, una Hna, hija de Llíria donó a la Congregación un terreno para la construcción del colegio.
Las obras empezaron en 1.968 y el 21 de noviembre de 1.970, día de festividad de la Virgen Niña que se celebra en toda la Congregación, la Comunidad y alumnas se trasladan al nuevo edificio.
Desde su llegada a Llíria, las Hermanas encontraron una gran acogida en la Ciudad y ellas, a su vez, se dedicaron con toda su entrega a educar lo mejor posible a los alumnos poniendo el acento en la formación de la persona para que cada uno fuera responsable de su propio desarrollo, alcanzara la madurez humana, optara libremente por la fe, y se comprometiera en la construcción de una sociedad más justa y fraternal basada en la paz, la verdad y el amor; actos y valores que se siguen transmitiendo en el centro.
La estancia de las Hnas en Llíria es de 123 años, lo que supone que, gran parte de la población ha podido participar y aprender de sus enseñanzas y consejos, de sus alegrías, de su entrega, de su solidaridad... Su esencia del colegio fue, es y será, según el Carisma de la Congregación, una entrega total a los alumnos y a familias.